De Costa alegre a Costa privada.


Esta semana ha sido marcada por la presencia del XXXI festival internacional del cine en Guadalajara, sin embargo, contrario a lo mediático, ahí donde brillaba la ausencia de alfombra roja, de celebridades, autoridades y snob´s, apareció una pequeña luz y entre las cintas que tuve oportunidad de apreciar mi itinerario del festival cerró de manera muy especial ante el estreno de un documental (género que además genera un gran simpatía en mi persona) llamado “derecho de playa”, bajo la dirección de Jorge Díaz Sánchez nos muestra un recorrido a lo largo de la costa jalisciense, que tiene como protagonistas a personas de gran calidez que se vuelven susceptibles a la empatía. Una vez más aparece ante nosotros la relevancia del documental como testimonio de un mundo que quizás a través de otros medios resultaría muy complicado conocer. Derecho de playa nos muestra una serie de prácticas y costumbres que enmarcan el estilo de vida de la costa alegre. Personalmente destacaría las formas en que los habitantes de dicha costa de manera semejante al resto de las zonas marítimas se dan a la tarea de conseguir sus propios medios de subsistencia, resaltando así las tareas colectivas y comunitarias que persisten dentro de estos modos de vida, aunado a ello también es notoria la persistencia en torno a la relación que estas comunidades tienen con la naturaleza, como parte de ella más que como poseedores,  donde la única finalidad es conseguir la materia indispensable para con ello llevar a cabo la satisfacción de necesidades materiales primarias sin perder el factor de la “identidad”, la cual hoy en día se puede interpretar como cierta forma de resistencia hacia una homogeneización a la cual tienden las metrópolis, en este sentido el filme nos muestra aunque no de manera muy radical pero sí una línea de concebir la vida que se nos presenta de manera representativa como una línea de fuga hacia las inclemencias y lo abrumador que resulta la vida en una sociedad que no se cansa de industrializarse, del consumo superfluo y de adorar al capital. 

Sin embargo, esto modos de vida se han visto afectados y amenazados en el último par de décadas, donde concretamente en nuestro estado que posee cerca de 342 km de litoral solo el 18% se encuentra en disposición de libre tránsito para todo ciudadano mexicano, estas últimas décadas han marcado una tendencia donde la propiedad privada ejerce su peculiar característica de usurpar el suelo que alguna vez fue social, además de su infalible explotación descarada de recursos naturales, lo cual conlleva una metamorfosis de costumbres, prácticas, formas de trabajo, convivencia, entre otros factores para las personas de la región, así vemos como el Siglo XXI sigue funcionando como marco temporal para llevar a cabo una especie de acumulación originaria, ya que dichas privatizaciones tienen un carácter violento, autoritario y posteriormente legitimado bajo la vía jurídica con cierta complicidad del estado bajo el argumento del desarrollo “eco- turístico”, mostrándonos los rostros de los pescadores quienes con coraje, tristeza, nostalgia y de manera irónica denominan a la costa alegre como la ahora costa privada.

Por otra parte, fuera del contenido, la forma, es decir, la estética de esta cinta arroja aspectos interesantes, mediante una serie de planos abiertos nos permite ver la exuberancia de las playas jaliscienses y con ello se vuelve imposible rememorar momentos de vida que jamás deben quedar en el olvido. Como dato curioso, y para sorpresa de los propios realizadores, existen una serie de tomas al interior del mar donde se observa la pesca mediante buceo, lo relevante de esto es que dichas tomas fueron ejecutadas por medio de los propios pescadores quienes de esta manera debutaron como cineastas, esto dicho por el propio director dado que en la película es imposible darse cuenta que haya sido parte de una sesión improvisada que se vio dotada de la propia experiencia y el conocimiento que los pescadores le otorgaron como aportación al documental.

Para terminar, enseguida dejaré la página a través de la cual se continuará subiendo material respecto al tema que aborda la película, material que no fue seleccionado para su resultado, aportaciones de los propios habitantes de la costa que siguen en esta lucha por defender el suelo (o aguas) de los ciudadanos mexicanos.

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